martes, 7 de junio de 2011

No me aguantaba mas. Se lo he tenido que preguntar. ¿Cuando ya no este, me echarás de menos?
¿Sabeís lo que me ha respondido?
Acaso, ¿tú me vas a echar de menos a mí?
En ese momento, giré la cabeza, era mejor no responderle, él sabia la respuesta, pero mi corazón en ese momento se estaba resquebrajando de nuevo, poquito a poquito, no tenia fuerzas para decirle que no podré soportar su ausencia. Él reía. No sonaba nada convincente su respuesta. Como siempre, él y sus manías. Él y sus respuestas. Él y sus sonrisas. Cada día me desconcierta más. Cada día me pregunto que haré cuando no lo tenga cerca. Lo peor de todo es que aun no he encontrado una respuesta
Ojalá que tu nombre se le olvide a esa voz, ojalá que la luna pueda salir sin ti.

2 comentarios:

  1. La verdad es que me ha dejado un poco fría esta entrada. No entiendo porque respondemos con preguntas, cuando lo que verdaderamente buscamos son respuestas convincentes. Sabes que opino yo de esa pregunta? O mejor dicho, sabes qué hubiese contestado? No debe importar si el otro te echa de menos, lo importante es que lo eches tú :$

    ResponderEliminar
  2. Hasta que no ete sin él, no sabrás la respuesta. Es una putada pero es así. Los hombres son unos obtusos, por eso no respondio. Un besazo guapa.

    ResponderEliminar

Gracias por comentar ;)