Bajo el frio recuerdo.

MIRADAS CÓMPLICES, SILENCIO INCÓMODO.

Tengo miedo de levantarme una mañana y no recordar nada, no recordar como eran tus besos, tus buenos días, tus abrazos, tus te quieros... tu todo. Tengo pánico al amanecer, y más al anochecer, tengo miedo de los cambios horarios, tengo miedo del paso de los segundos, tengo miedo a no poder imaginarte en mi mente cada instante. Igualmente, se que te has marchado para no regresar, pero, me queda tu recuerdo. Es bonito dibujarte cada vez de una forma diferente, con mil colores a la vez imaginar tu olor. Da pena no volverlos a disfrutar juntos, pero se que tú eres de nuevo feliz, y me hace sentir un poco mejor a mí. ¿Dibujas tanto en tu mente como lo hacías conmigo? Recuerdo que reías a carcajadas cada vez que estábamos desnudos, y pasabas tu mano por mi piel, la besabas, la tocabas... Y recuerdo que me decías que te tirarías así toda la vida, y ahora ya nada queda de eso... El sentido de tu tacto voló igual que lo hacen las estaciones. Solo me aferro al mísero recuerdo, que poco a poco desaparece como un día desapareciste tú.